Transformamos el futuro de la Patagonia desde sus niños creando bosques nativos de bolsillo en jardines infantiles públicos como espacios de juego, aprendizaje y conexión con la naturaleza. Junto a las comunidades educativas, implementamos un modelo pedagógico de educación al aire libre que promueve el desarrollo integral, la biodiversidad y la resiliencia social en zonas extremas. Al plantar árboles que crecerán con ellos, los niños cultivan vínculos profundos con su entorno, convirtiéndose en guardianes de los ecosistemas que cuidarán de las generaciones futuras.
